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miércoles, 8 de marzo de 2017

ESTRATEGIA MILITAR ROMANA

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación de Tortuga

Probablemente se trata de la formación más conocida y más básica utilizada por el Imperio Romano para defenderse del ataque enemigo. Esta táctica consistía en el alzamiento de los scutum por encima de las cabezas para proteger la parte superior, de manera que solo la parte delantera, junto a la de los flancos, eran las únicas que sostenían los scutum para proteger la zona anterior y la de los laterales.
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano, testudo
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano, testudo

La importancia de este sistema estribaba en que permitía el desplazamiento de las tropas a la vez que se protegían del ataque enemigo, sobre todo orientado a los lanzamientos de larga distancia. Flavio Josefo habló de ello durante el asedio de Jerusalén contra los judíos:
“Se deslizaban las flechas sin dañar, y […] los soldados pudieron, sin riesgo, minar la muralla y prepararse para pegar fuego a la puerta del Templo. “
Su mayor limitación era que se trataba de una formación apretada y lenta.

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en Orbe

Se trata de otra formación defensiva, que se utilizaba cuando las tropas quedaban aisladas de la batalla. La formación era circular, quedando los soldados pegados cuerpo a cuerpo y protegidos por sus scutum con sus pilums al frente. Y su uso tenía el único fin de ganar tiempo para la llegada de refuerzos, pues se trataba de una medida desesperada que les obligaba a luchar o a morir en caso de que no llegase el auxilio.

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en Orbe
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en Orbe

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación Anti-Caballería

Agachados, los primeros hombres de la línea colocaban sus scutum a modo de muralla y aprovechaban cualquier hueco natural para alzar suspilums en una posición semi-vertical. Podía haber una segunda fila erguida, con las pilums colocadas en horizontal directamente apuntando hacia el enemigo. Estas formaciones, para ser efectivas, debían de ser sorpresivas y rápidas para pillar de improviso a la caballería.


Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación Anti-Caballería
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación Anti-Caballería

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en cuña

Entrando ya en tácticas de ataque, la formación en cuña tenía como objetivo el ataque frontal por parte de un solo soldado en el vértice.
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en cuña
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en cuña

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación de Tortuga

Probablemente se trata de la formación más conocida y más básica utilizada por el Imperio Romano para defenderse del ataque enemigo. Esta táctica consistía en el alzamiento de los scutum por encima de las cabezas para proteger la parte superior, de manera que solo la parte delantera, junto a la de los flancos, eran las únicas que sostenían los scutum para proteger la zona anterior y la de los laterales.
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano, testudo
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano, testudo

La importancia de este sistema estribaba en que permitía el desplazamiento de las tropas a la vez que se protegían del ataque enemigo, sobre todo orientado a los lanzamientos de larga distancia. Flavio Josefo habló de ello durante el asedio de Jerusalén contra los judíos:
“Se deslizaban las flechas sin dañar, y […] los soldados pudieron, sin riesgo, minar la muralla y prepararse para pegar fuego a la puerta del Templo. “
Su mayor limitación era que se trataba de una formación apretada y lenta.

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en Orbe

Se trata de otra formación defensiva, que se utilizaba cuando las tropas quedaban aisladas de la batalla. La formación era circular, quedando los soldados pegados cuerpo a cuerpo y protegidos por sus scutum con sus pilums al frente. Y su uso tenía el único fin de ganar tiempo para la llegada de refuerzos, pues se trataba de una medida desesperada que les obligaba a luchar o a morir en caso de que no llegase el auxilio.
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en Orbe
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en Orbe

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación Anti-Caballería

Agachados, los primeros hombres de la línea colocaban sus scutum a modo de muralla y aprovechaban cualquier hueco natural para alzar suspilums en una posición semi-vertical. Podía haber una segunda fila erguida, con las pilums colocadas en horizontal directamente apuntando hacia el enemigo. Estas formaciones, para ser efectivas, debían de ser sorpresivas y rápidas para pillar de improviso a la caballería.
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación Anti-Caballería
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación Anti-Caballería

Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en cuña

Entrando ya en tácticas de ataque, la formación en cuña tenía como objetivo el ataque frontal por parte de un solo soldado en el vértice.
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en cuña
Formaciones y Tácticas del Imperio Romano: Formación en cuña


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